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miércoles, 27 de junio de 2012

Despedida

oceano

 

Se me había olvidado lo que se sentía al decir adiós.

Hacía mucho tiempo que el pañuelo de Penélope en la estación no se agitaba con tanta fuerza y no sé si con la risa nerviosa que me sobrecoge cuando no soy capaz de contener mis emociones, pueda  superar la tristeza que me embarga. Lo que me consuela es que, al contrario de Penélope, no me voy a quedar tejiendo un manto esperando a Ulises para deshacerlo después, sino que cogeré el tren. Un tren  desconocido, un tren con diferentes pasajeros, un tren con destino a otro lugar imaginado, con mi maleta repleta de nuevas ilusiones e incertidumbres. Un tren donde la nueva gente querida sólo ha entrado de puntillas, de paso, y quedarán en el andén despidiéndose de mí , pero tan dentro que nunca podré separarme de ellos.

Ulises no tiene que volver de ninguna parte, afortunadamente me espera impaciente. Pero esa inquietud de separarme de todo lo soñado, convierte mi corazón en una máquina acelerada donde cada impulso es más fuerte que el anterior, donde las lágrimas pelean por salir de mis ojos disimulados , donde el dolor de saber un adiós , por momentos se hace insoportable.

Un año mágico que no volverá a repetirse. Quizás en otro momento, en otro espacio, en otro lugar… pero este año ha sido único y no quiero  de ninguna manera dejarlo atrás.

La vida es como una montaña rusa, tiene sus altibajos, vas vienes, entras sales… y al igual que en Parque de Atracciones eliges donde subirte, también elijes con quién quedarte. Lo malo es que , como cenicienta, a las 24:00h se rompe el hechizo y todos lo que te acompañaron en el carrusel, se esfuman, no están, parece que marchan pero eres tú la que tienes que recoger bártulos, maletas, sentimientos… y volver a tu lugar. Un lugar en el que te aman, te esperan, pero aquellos que un día montaron en las atracciones contigo, aquellos que rieron en  la casa de los espejos, los que creyeron en ti y te animaron, a los que amaste de alguna manera (sí, porque el AMOR tiene tantas formas…) todos aquellos ya no te acompañarán. O quizás sí lo hagan:  si somos tan generosos de dejarles un espacio en el alma, un espacio donde nunca se nos olviden, un espacio donde se queden a vivir con nosotros para siempre, entonces nunca se apartarán de tu lado, al fin y al cabo, la gente a la que quieres forma parte indispensable de ti.

No quiero irme de lo que siento. No quiero marchar ni decir adiós a estos montes, a estas paredes, a estas habitaciones de cuento llenas de pequeños duendes que me han hecho crecer en tantos aspectos… pero me tengo que ir. Y debo decir adiós, o mejor aún un hasta luego que no sea el final de nada sino el principio de una amistad profunda, hermosa y duradera, de un encuentro increíblemente fortuito que ha llenado mis días y mis noches de miles de alegrías e ilusiones, que me ha ayudado a confeccionar uno de los capítulos más intensos de mis 38 años de vida.

Porque les quiero. Porque os quiero. Porque os necesito conmigo aún en la distancia. Porque os habéis convertido en mis imprescindibles, en mis imperdibles y mis invencibles, porque somos así con todo, con lo bueno, lo menos bueno y lo mejor.

No quiero irme, pero me despido. Con un fuerte abrazo , una sonrisa ,un puñito en el corazón y un ¡hasta luego!

Porque en el andén del AMOR con mayúsculas os espero. Y seguro que nos tomamos un café y unos churros y volvemos a cantar hasta dejarnos la voz por el camino.

Yo, no pienso irme de vosotros; espero que hagáis lo mismo conmigo o, si acaso…. parecido.

lunes, 25 de junio de 2012

Los pasos

Entonces… llegó un Ángel

Y le pedí que me abrazase… y lo hizo

y le ´pedí que me besara… y me besó

y le quise en mis noches y mis días… y se quedó a mi lado

y le necesité de báculo… y ahí estuvo

y le amé intensamente… y me correspondió

y la distancia nos distrajo… pero él fue más fuerte

Pero ahora no sonríe, ya no ama, no besa, no canta, no pinta, no compone, no juega, no corre, no inventa, no baila…

¿Qué le pasa a mi Ángel, qué teme, qué le ahoga y le aprieta, qué sueña, qué imagina, qué vive?

Retrocederé sobre mis pasos,

al momento en que le pedí ser báculo y ahora,

lo seré yo

sábado, 16 de junio de 2012

Es por ti- Luz Casal

Hoy tengo ganas de cantarle a la luna. Y qué mejor manera de hacerlo que con Luz Casal.

Pocos lo saben, pero esta canción está traducida de la canción catalana “Boig per tu", compuesta por el catalán Pep Sala.

Amo a Luz Casal y todo lo que canta.

Pero hoy , que quiero cantarle a la luna, o a quien está lejos y aun pareciendo cerca no puedo alcanzar, me ha venido a la boca, a la garganta. Aquí os la dejo

 

 

Escribo una y otra vez
"No puedo vivir sin tí".
Me paso los días esperándote,
cómo te puedo amar si
lejos de mí estas,
si yo estoy loca es por ti.
Sé muy bien que desde donde estoy
yo no llego a donde estás tú
y aunque dentro de mi copa está
reflejada tu fría luz
la beberé servil y acabada...
Es por tí,
Sin tí el amanecer
en lágrimas nacerá
mojando la lluvia que caerá sin fin
y tú me atraparás
con esa blanca luz.
Si yo estoy loca, es por ti.
Sé muy bien que desde este lugar
yo no llego a donde estás tú
y aunque dentro de mi copa está
reflejada tu fría luz
la beberé servil y acabada...
Es por tí.

domingo, 10 de junio de 2012

Huida

 

huir 

Le escuchaba hablar y el dolor de cabeza se iba haciendo cada vez más insoportable ¿Por qué seguía allí? ¿por qué seguía escuchando palabras sin sentido que le sonaban huecas, vacías, a nada, y encima hasta su tono de voz le molestaba?

Aquello no tenía ningún sentido, pero no tenía fuerzas para mandarle callar, o simplemente darse media vuelta y emprender un nuevo camino. Y por alguna inercia extraña, seguía escuchando.

Sus sentimientos habían cambiado. Todo en ellos había cambiado. En su interior, un revoltijo de emociones intentaban salir a flote, pero se ahogaba. No había nada que se pareciese a lo de entonces, si acaso un leve rumor de lo que fueron. Pero allí seguía sin atreverse a hacer nada, ahora ya no escuchaba, sólo oía.

Imaginaba cómo sería una nueva huida. Le aterrorizaba empezar de nuevo, pero no la aguantaba más. Ya no se reían. En sus labios apenas, a veces, sólo a veces, aparecía una tímida sonrisa. Cuando llegaba por las tardes, muerto de cansancio, veía su gesto amargo y desconsiderado y más reproches, más ruinas, más desprecios y luego la estúpida pregunta “¿es que ya no me quieres?”

Demasiado tiempo con lo mismo. Ya no sabía si su voz estaba tan grabada en su interior que la escuchaba sin que ella abriese la boca, ya no sabía que si estaba rozando el pequeño límite que separa la cordura de la locura. Se veía incapaz de  contestarle, no sólo por el cansancio físico que traía derrotado de su trabajo, sino porque le parecía inútil realizar un esfuerzo mental desproporcionado ante aquella sinrazón oscura. Nada de lo que dijese, hiciese o no hiciese, estaba a su gusto. No hay nada peor que cargar tus frustraciones contra otro, pero ella no lo entendía.

“¿Qué hago aquí?” quizá le ataba el recuerdo o la posibilidad de ser lo que desearon ser en un momento de sus vidas pero nunca lograron. Quizá la desconfianza que supone volver a ser uno solo; quizá la comodidad de haberse acostumbrado a ser machacado literalmente por ella, y ,aunque hundido y humillado, ahí seguía, impasible, sin atreverse a dar un paso. Quizá todo volviese a ser como antes, si es que antes lo que hubo fuese bueno.

Ella por fin calló.

Abatido, cansado y casi en un momento de desquicie, abrió el cajón donde cada noche se refugiaba. Esperaba encontrarla allí, donde siempre aguardaba: un refugio para sus noches amargas, una liberación de su vida triste y vacía, una caricia en medio de la amargura y un beso a tiempo cuando menos lo esperaba. Pero no estaba. En  su lugar,  una despedida y una razón más que suficiente.

Entonces lo decidió.

viernes, 8 de junio de 2012

Quién fuera él…

Estoy buscando una palabra
En el umbral de tu misterio
Quien fuera ali baba
Quien fuera el mitico simbad
Quien fuera un poderoso sortilegio
Quien fuera encantador.

Estoy buscando una escafandra
Al pie del mar de los delirios
Quien fuera jackes coustou
Quien fuera nemo el capitan
Quien fuera el batiscafo de tu abismo
Quien fuera explorador.

Corazon, corazon obscuro
Corazon, corazon con muros
Corazon que se esconde
Corazon que esta donde corazon
Corazon en fuga, herido de dudas de amor

Estoy buscando melodias
Para tener como llamarte
Quien fuera ruiseñor
Quien fuera lennon y mcartney,
Sindo garay, violeta, chico buarque,
Quien fuera tu trovador.

Corazon, corazon obscuro
Corazon,corazon con muros
Corazon que esconde
Corazon que esta donde el corazon
Corazon en fuga, herido de dudas de amor (corazon)

Silvio Rodríguez

Nada más que añadir

Te amaré, te amaré como al mundo
Te amaré aunque tenga final

Te amaré, te amaré en lo profundo
Te amaré como tengo que amar

Te amaré, te amaré como pueda
Te amaré aunque no sea la paz

Te amaré, te amaré lo que queda
Te amaré cuando acabe de amar

Te amaré, te amaré si estoy muerto
Te amaré el día siguiente además

Te amaré, te amaré como siento
Te amaré con adiós, con jamás

Te amaré, te amaré junto al viento
Te amaré como único ser

Te amaré hasta el fin de los tiempos
Te amaré y después, te amaré


Silvio Rodríguez



martes, 5 de junio de 2012

Eso

Me he sorprendido esta mañana cantándome esta canción.

No es un artista al que haya seguido con demasiado interés, pero este disco en particular me parece muy bueno. Dejo la letra para que la penséis, la disfrutéis, la cantéis, la durmáis… haced con ella lo que os plazca

Primero, que tú has sido para mí
lo más grande de este mundo
yo que fui lo que tú digas
pero que… hasta te regalo aquellas risas


Dos, que alguna vez quisimos compartir
el breve instante que es la vida
y tres, que hoy yo vivo en las ruinas de un silencio
que va dejándome sin voz
lo que no entiendo:


Es que ahora vengas otra vez a prometerme
una vida entera, pero a tu manera
¿en qué momento de mi largo caminar
perdimos eso?


Verdad que soy difícil, pero he sido para ti
lo único profundo
también verdad que procuraba estar conmigo
cuando estaba más confuso


Tú tratando de existir
que me perdone el universo
y yo guardándome el secreto
que ya no quiero escuchar otro bolero más
tú empeñada en que querías ser feliz
y yo sentir,
lo que no entiendo:


Es que ahora vengas otra vez a prometerme
una vida entera, pero a tu manera
dime amor, ¿en qué momento de mi largo caminar
perdimos eso?
Yo te buscaba en los azules
y me enfrentaba a tempestades
y ahora no sé si tú exististe
o eres sólo un sueño que yo tuve
pero es que hay gente
que no consigues olvidar jamás…
no importa el tiempo que eso dure
Una frase resumió


lo diferente de los dos:
hoy seguro ya no hay na’…
y lo que dure amor duró
No se puede ser verdad si yo…


Yo te buscaba entre las nubes
y me enfrentaba a tempestades
y ahora no sé si tú exististe
o eres sólo un sueño que yo tuve
pero es que hay gente
que no consigues olvidar jamás…
no importa el tiempo que eso dure
No puede ser verdad si yo…
Ya no te busco en los azules
ni me enfrento a tempestades
ya no me importa si me quisiste
porque en mi sueño yo te tuve
además hay gente que no consigues olvidar jamás…
no importa el tiempo que eso dure

domingo, 3 de junio de 2012

Regreso

regreso-a-casa
Había dejado el Blog el año pasado por el mes de Mayo y un año y un mes después, parece que tenga ganas de resucitarlo.
Han pasado muchas cosas en este tiempo. Cosas importantes, que harán que mi vida vuelva a girar otra vez 180º; la eterna ruleta o el eterno tiovivo, pero así soy yo : inconstante, indecisa, inquieta, buscadora… y creo que hasta novelista de mi propia historia y demasiado dramática para expresarlo todo, eso también. Así que con una necesidad inmensa de imprimir todo aquello que me sucede, vuelvo a la carga.
Es curioso cómo la gente como yo, que escribimos cuando el cuerpo nos lo dicta o cuando no podemos decir las verdades a los cuatro vientos por ser demasiado complejas para entenderlas o porque ni siquiera pueden salir reales y claras, sólo encontramos la inspiración cuando los sentimientos andan desbordados. Y no digo para bien o para mal, sino simplemente , desbordados. Mi idea de este blog no nació para hablar de mí misma, sino para desahogar emociones por boca de otros. Otros inventados por mí o conocidos al paso, pero en cada uno de ellos , algo de mí se esconde,  por una necesidad imperiosa de saber quién soy y lo que quiero, que aún ando buscándome y no me encuentro. Como dice el título de este blog: “lo que quiero ser de mayor”.
Mi forma de ser y mi vida en general, pasan por unas pequeñas crisis en las que tengo un deseo inmenso de ser otra cosa. De seguir siendo yo , pero con otros mundos. Cuando algo no marcha, me refugio en la escritura. Como un consuelo, como una balsa en la que tumbarse y simplemente dejarte llevar por la corriente de agua; como un momento íntimo, una pequeña confesión a uno mismo, que deja de serlo en el momento en que esto sale afuera, otro lo lee y explora tu pequeño pensamiento. Pero no importa, porque cuando se expresa, se libera parte de la carga que te aprieta y ahoga y el cinto de repente parezca que tenga otro agujero más y ande más suelto.
Estoy feliz.
He conseguido lo que venía buscando hace tiempo. Pero algo no marcha y miedo me da ponerle nombre. No sé si dejarlo pasar o rebuscar en mis adentros a ver qué encuentro. Si es que la mochila pesa demasiado o es que hay que deshacerla, volverla a hacer  y construir de nuevo. Lo primero es fácil: sacamos lastre… y arreglado; lo segundo da más vértigo. No soy de dejarme llevar por la vida, de esperar que algo ocurra, un milagro? Soy de hacer, de ir proponiendo a mi camino senderos que me lleven no sé a dónde pero que me lleven. Que no me dejen anclada en tierra, ni echar raíces demasiado profundas en tierras sin abono, sin sol , sin alegría.
He vuelto.
Veremos a ver qué ocurre.

viernes, 1 de junio de 2012

Infidelidad

 

Había algo en aquél adiós que le inquietaba. Tenía la sensación de que no iba a ser para siempre y que el sentimiento de que así fuese realmente, le iba a traer complicaciones.

Se había topado con situaciones semejantes a lo largo de su vida pero el abrazo en que se sumió con tanta avidez como desgarro, le confirmó que algo no era como otras veces.

Se marchó calle abajo con un ahogo en la garganta, con ese nudo que aprieta y vence cuando las emociones no pueden ni deben salir porque tu vida es poliédrica y anclada. Nada debía moverse ni una sola coma. En la historia de su vida todo estaba perfectamente hilado y así debía seguir siendo. El vértice de la pirámide que adornaba sus sentimientos estaba ocupado por una moral arcaica y absurda en la que ya ni siquiera era capaz de creer, pues él le había roto todos los esquemas, ella misma se había roto en mil pedazos.

Aquél espíritu libre con el que ella no contaba, le había abierto un universo de sueños y maneras que desconocía. Sin ni siquiera rozar el más mínimo pedazo de su piel, sin atreverse a mostrarse tal cual era, sin ni siquiera decir “estoy aquí” le deseaba en silencio y lo disfrazaba de juego inocente con el que cada noche, después de acostar a sus pequeños, procuraba vencerle escondida en la maraña de sus negaciones: “no puedo, no debo, no es posible, es mentira, no siento…”

Al amanecer, aún no había cerrado los ojos por miedo a soñarle y su marido, en un rutinario acto reflejo, la abrazaba dándole los buenos días y entonces, deseaba con todas  sus fuerzas desaparecer bajo las sábanas, que le tragase el mundo con toda su rabia y no contradecir más su maltrecha vida. Sus niños le sacaban del momento aciago y entonces se sentía liberada.

Llevaba meses entre la vigilia y el sueño, en ese letargo de donde no salen los sonámbulos y quien los ve piensan que están despiertos. En un mundo donde cada mirada cruzada, cada roce al paso, cada momento de encuentro… era vivido con una intensidad heredada de un folletín barato.

Pero el abrazo de aquella despedida…

Se armó de valor, descolgó el teléfono y con el ansia propia de una adolescente cuando por vez primera llama a su futuro amante marcó su número y escuchó su profunda voz ronca y dormida

-Hola

- ¿Eres tú?

- Si

- Creí que nunca llamarías

- Ya ves

- ¿y?

- ¿y tú?

- de sobra lo sabes ¿necesitas que te lo diga?

- No, así está bien

- Te estaré esperando, no sabes cuánto te deseo

- (silencio)

- ¿vienes?

- salgo en 1 hora

- Perfecto, aún siento el calor de tu abrazo,el último día, recuerdas?

- no digas nada, por favor…

- Venga, no tardes

- te amo

- ¿qué?

- he dicho que te amo

- oye, oye, espera un momento… ¿qué tiene que ver el amor en todo esto? ¡ yo hablaba de echar un polvo! y tú también , no? (al otro lado del teléfono, se escuchaba un llanto desconsolado)  me parece que tienes un lío monumental, tía, y yo, en eso, no me meto. Venga, va, hasta la vista!!

Y colgó el teléfono

Deshecha, confusa y rota, de pronto se dio cuenta de que todas sus dudas, habían quedado resueltas.

Volvió a la cama con su marido. Le abrazó.

Y por primera vez en muchos meses, pudo dormir tranquila.

Después de una larga tormenta…

.. siempre llega la calma.

Viene  cargada de sentimientos confusos y enmarañados.

Y después de sobresaltos de truenos y relámpagos

la adrenalina queda,  rebosa aún nerviosismo y desesperanza.

Se acerca el olor a tierra húmeda y tierna,

regada por el agua.

Llegan nuevos horizontes con soles y nubes

que amenazan,

o acogen

o te cantan.

Y una extraña melodía

se empeña en salir de mi garganta.

Porque tengo ganas de gritar

a los cuatro vientos

lo que sale desde el fondo de mi alma.

Y correr desnuda por el valle mojado que empapa,

por el fuego que sale desde el mar de mi espalda.